Hace más de dos mil años, un general chino llamado Sun Tzu, escribió uno de los grandes clásicos de estrategia militar: El arte de la guerra. Sun Tzu fue un general, estratega militar y filósofo de la antigua China. El nombre por el que lo conocemos es en realidad un título honorífico que significa «Maestro Sun».
Sun Tzu fue un general, estratega militar y filósofo de la antigua China, se considera un personaje de gran influencia y respeto en la cultura e historia China.
SUN TZU EL ARTE DE LA GUERRA
Su libro El arte de la Guerra se considera una obra maestra sobre la estrategia bélica, y desde hace unos años se está aplicando a todo tipo de actividades, en especial al mundo de los negocios utilizándose en programas de gestión de empresas y liderazgo enfocados en la gestión de conflictos y empresariales.
SUN TZU EL ARTE DE LA GUERRA Y EL MUDO LOS NEGOCIOS (COMPETENCIA)
No es la primera vez que se hace una aproximación / comparación de las principales frases del libro aplicado al mundo de las empresas, así que en este artículo voy a dar mi versión de las frases más destacadas.
- Si conoces al enemigo y te conoces a ti mismo, no temas el resultado de cien batallas
Aplicado a la competencia empresarial es muy claro, al enemigo no le puedes conocer ya el tamaño del mercado lo hace imposible, pero si puedes conocerte a ti mismo. Cuando más te conozcas y controles tu capacidad de reacción al mercado mejor.
- Nunca se debe atacar por cólera y con prisas. Es clave tomarse tiempo en la planificación y coordinación del plan.
Hay veces que en el mudo de los negocios entramos en fase de revancha, esta se produce cuando una operación ha salido mal y queremos recuperar cueste lo que cueste.
Si tenemos planteado de antemano lo que haremos cuando esto ocurra mucho mejor, podremos reaccionar a la perfección.
- Cuida de la salud física y permanece donde haya innumerables recursos. Cuando no existe enfermedad en un ejército, se dice que este es invencible.
El mundo empresarial requiere mucha concentración y una buena manera de aumentar la concentración es estar en buena forma, cuidarse hará que seamos más rápidos en el momento de reaccionar y estar concentrados.
La defensa es para tiempos de escasez, el ataque para tiempos de abundancia.
Aplicado: lo podemos relacionar con la gestión monetaria, si estamos en una mala racha tenemos que reducir el apalancamiento, si por el contrario todo va sobre ruedas y por ejemplo ya tenemos cumplido el objetivo semanal, podemos arriesgar el excedente sin perder nunca nuestro objetivo.
- Se debe ponderar y deliberar antes de hacer un movimiento. Conquistará quien haya aprendido el arte de la desviación.
Antes de entrar en el mercado tenemos que tener muy claro porque queremos operar, no se tiene que hacer por hacer, hay que operar porque el mercado nos está diciendo que es el momento, todo, lógicamente, según nuestro sistema.
- Cuando las órdenes son razonables, justas, sencillas, claras y consecuentes, existe una satisfacción recíproca entre el líder y el grupo.
Si se tiene un plan de negocio realista, sensato, pensado y trabajado, todo tiene sentido y la consecución de los objetivos hará que se mejoren con el tiempo.
- Todo tiene que ser justo y razonado.
No hay ningún país que se haya beneficiado por guerras prolongadas.
No es necesario operar durante muchas horas, de hecho, es perjudicial. Estando mucho tiempo delante de la pantalla no tendremos capacidad de reacción, aunque solo sea por agotamiento. Mejor poco tiempo, pero de calidad.
Como podemos ver muchos de estos puntos se pueden relacionar con el mundo de los negocios, de hecho, la competencia empresarial es una batalla constante contra uno mismo. El sistema somos nosotros.